jueves, 4 de octubre de 2007

Un Dios adiós

Con la túnica
de los tumultos
asombra la complejidad
de sus calles

incendia
palabras y mendigos

con cansancio
repone los discursos

la luna
abofetea la noche

sus medias sucias
son un rostro de mujer
con manos de hombre

la ciudad
mastica los pasos vencidos

su dios
aporta la grandeza
blasfema…
ser nada y nadie


nos untamos un presente
de caricias muertas
adiós (Dios).

César Augusto.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sublime, adios, (a-Dios)